El ser excelente es aquél que se sobresale en relación a los otros, o sea, que logra ser superior a los demás en
la actividad que realiza. El ser excelente esta siempre en búsqueda de
progreso, tiene hambre de aprender y sed de conquistar. Ahora, el ser mediocre nunca
sale de la zona de conforto, tiene pereza de aprender y esta siempre
responsabilizando a los otros por su situación. El ser superior no quiere ser
uno más en este mundo, por eso trabaja con un fin en la mente, nunca se hace de
victima, pues él es arquitecto de su por venir.