El poder de la Oración

viernes, 30 de noviembre de 2012

Síntomas, Causa y Solución




En la medicina para un doctor llegar a la causa de la enfermedad primer él necesita conocer los síntomas. Por eso, ellos siempre hacen preguntas del tipo: ¿Cómo se sientes?  ¿Dónde le duele? Entre otras preguntas  y mediante lo síntomas pueda identificar la causa. Claro que a veces el paciente tendrá que hacer algunos exámenes para comprobar cuál es el problema.



Pero lo síntomas revelan la causa y la causa apunta cuál es la solución. Pues de acuerdo con el tipo de enfermedad se hará el tratamiento. Sí es un órgano dañado será necesario un trasplante, sí es una infección será necesario antibióticos, sí es cáncer tendrá que quitar el cáncer, después hacer quimioterapia. Cuando por ejemplo el corazón no está trabajando bien, toda nuestra vida cambia.

Síntomas de problema en el Corazón:

·     Dificultad para respirar.
·     Molestias u opresión en el pecho.
·     Náuseas o vómitos.
·     Mareos o desmayos.
·     Sudoración fría.
·     Palidez.
·     Dolor de espalda.
·     Dolor de mandíbula.
·     Dolor en los brazos.
·     Taquicardia (ritmo acelerado del corazón).

      Claro que los problemas del corazón pueden ser evitados. ¿Pero cómo? A través de la prevención: Hacer una dieta saludable y realizar actividad física. Es claro que el costo de la prevención es mucho menor que los  prejuicios de la enfermad. Hasta porque, quien no tiene tiempo para cuidar de su salud tendrá que encontrar tiempo para cuidar de su enfermedad.
      
      Así también quien no cuida del destino de su alma ahora, pasará la eternidad en tormentos. Pues así como los síntomas mencionados arriba revelan que alguna cosa en el corazón no está bien. Hay determinas síntomas que revelan que el alma e  interior no está bien. Por eso, yo te pregunto: ¿Usted tiene estos síntomas?

Síntomas de problemas en el Alma u interior:

·     Dificultad para perdonar.
·     Miedo, pánico o temor.
·     Depresión o ganas de morir.
·     Odio, rencor o deseo de venganza.
·     Dudas, indecisión o pesimismo.
·     Un vacío en el interior.
·     Complejos, obsesión u infidelidad.
·     Inconstancia, inestabilidad o doble personalidad.
·     Descontrolado o hipersensible.
·     Maldecido, azarado o fracasado.
·     Avaricia, egoísmo o ambición.
·     Hipocresía, envidia o mentira.
·     Ansiedad, nerviosismo o celos.

      Sí usted tiene uno o más de estos síntomas es porque su alma está enferma. En este caso la solución es como un trasplante del corazón. Está escrito: “Y os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros”…(Ezequiel 36:26) Dios quiere poner adentro de usted un Espíritu nuevo, que hará toda la diferencia en su vida. Pero Dios no da el Espíritu Santo por medida, así también la entrega de la persona no puede ser por medida. Tiene que ser completa, o sea, lo que soy, lo que tengo y lo que quiero. Cuando la persona se entrega a Dios los síntomas de un interior enfermo o síntomas de posesión maligna desaparecen. Y la persona pasa a revelar los frutos del Espíritu Santo.

Frutos del Espíritu Santo:

·     Capacidad para perdonar.
·     Valentía, tranquilidad o paz.
·     Ánimo o ganas de vivir.
·     Amor, alegría o deseo de ayudar su prójimo.
·     Certeza, definición u optimismo.
·     Luz en el Interior.
·     Capacidad para superar traumas o defectos.
·     Perseverancia, constancia o paciencia.
·     Dominio propio o mansedumbre.
·     Desprendimiento o generosidad.
·     Sinceridad, verdad o fidelidad.
·     Sabiduría o determinación.
·     Bondad, equilibrio o sensatez.

      Vamos ahora reflexionar en está palabra: “ Yo Soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mi, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque sin mi nada podéis hacer.” ( San Juan 15 : 5)

No hay comentarios: