Hay
un dicho que dice:
“El ejemplo vale más que mil palabras”
De
todas las enseñanzas que existe, la que habla más fuerte es el ejemplo. Pues de
lo que sirve decir con palabras una cosa y mostrar con el comportamiento otra.
En los días actuales existen muchos predicando esa frase: “Haga lo que le digo,
pero no haga lo que hago”. Un verdadero líder como el Señor Jesús, no inspira
solamente con palabras, sino con su
ejemplo. Generalmente cuando una persona muere, lo que las personas se acuerdan
son de los ejemplos que ella dejó, sean estos buenos o malos.
El que dice que
permanece en él, debe andar como él anduvo (1 Juan 2:6). Esta firme declaración
bíblica nos lleva a plantear las siguientes preguntas: ¿Cómo anduvo Jesús?
¿Cuál fue su ejemplo de vida? Creo que debiéramos seguir el ejemplo de
Jesús en todos los actos de nuestra vida. Cada vez que nos toca hacer una
decisión deberíamos dirigirnos esta pregunta: "¿Qué haría el Señor en mí
lugar?" Si hacemos esto, nunca iremos por caminos equivocados.
Amor:
Visión:
·
Y el que oyere mis palabras, y
no las creyere, yo no le juzgo; porque no he venido á juzgar al mundo, sino á
salvar al mundo. (San Juan 12:47)
Obediencia:
·
Diciendo: Padre, si quieres,
pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. (San Lucas
22:42)
Valores
Eternos:
·
No os hagáis tesoros en la
tierra, donde la polilla y el orín corrompe, y donde ladronas minan y hurtan;
Mas haceos tesoros en el cielo, donde ni polilla ni orín corrompe, y donde
ladrones no minan ni hurtan. (San Mateo 6:19-20)
Humildad:
·
Pues si yo, el Señor y el
Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavar los pies los
unos á los otros. (San Juan 13:14)
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