El poder de la Oración

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Enfoque en la Dirección Cierta


"Un hombre que desea dirigir una orquesta
debe dar la espalda a la multitud."
James Crook


Existe un poder cuando mantenemos nuestra mente enfocada en hacer una sola cosa, nosotros seres humanos a veces queremos hacer dos o más cosas al mismo tiempo. Pero estudios muestran que cuando concentramos nuestro enfoque y esfuerzo en un único objetivo logramos obtener mejores resultados. O sea, no da para atender el teléfono y poner atención a lo que se esta hablando y a lo mismo escribir acerca de otro asunto. Porque no lograría comprender lo que se esta escuchando o entonces vendría a escribir cosas equivocadas. Lo mejor es parar de escribir y poner atención a lo que se esta escuchando por el teléfono, así será posible obtener una buena comprensión, después volver a escribir con concentración.  
Hay dos cosas que merecen toda nuestra concentración y esfuerzo, la primera de ellas es la Palabra de Dios. ¿Cuántas personas de verdad escuchan la palabra de Dios y comprenden? ¿Y porque no? Sencillamente por que no están enfocadas en lo que están escuchando, algunas personas en el momento de la predicación están siempre con el pensamiento en otro lugar. Y siendo la palabra de Dios la semilla, como vendría fructificar en una persona que esta siempre distraída con otros pensamientos. Incluso el diablo es el más interesado que usted quede distraído en el momento de la predicación. Tiene unos que se duermen en la hora de la predicación, o sea, es solo llegar en la iglesia que viene un sueño terrible, otras el diablo sopla pensamientos y preocupaciones en la hora de la palabra. Satanás sabe que una vez la palabra de Dios siendo oída, comprendida y puesta en práctica, vendrá a traer muchas bendiciones.
La segunda cosa que merece nuestra concertación es la Oración, pues por medio de ella las murallas se caen, las cadenas son hechas pedacitos, lo imposible se hace posible y mantenemos comunión con Dios. Pero el problema es que cada vez más encontramos personas con dificultades para orar. Una vez escuche una frase que dice: “Cuando una persona es débil en la oración, todo en la vida se vuelve débil. Pero cuando se es fuerte en la oración, todo se vuelve fuerte; Familia, Salud, Economía, Matrimonio etc.” Por eso, mucha atención con las distracciones en el momento de la oración, tiene que hasta mismo vigilar con los pensamientos. No deje que nada y nadie quite su concentración, mantenga su fe enfocada. El Señor Jesucristo dijo: “Este pueblo me alaba con los labios, pero su corazón esta lejos de mi”.
Reflexione acerca de esto y acuérdate que hay cosas que nuca vuelven atrás: la flecha echada, la palabra pronunciada y la oportunidad perdida. Por eso, cuando tenga oportunidad de escuchar la palabra de Dios o hacer una oración no permitas que nada quites su concentración.

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